Los expedientes de más de 31 propiedades que fueron desafectadas del catálogo de Inmuebles Protegidos de la Ciudad, serán investigados por la Comuna, a pedido de concejales que detectaron irregularidades en el trámite iniciado en 2007.

Se trata de un paquete de legajos de propiedades que habían sido desafectadas de ese registro en la gestión municipal anterior pero que no tuvieron la refrenda del Concejo Deliberante, paso necesario para finalizar el trámite.

Es decir, sus propietarios habían sido notificados en ese momento de que sus inmuebles no pertenecían más a la categoría de “bienes protegidos”, pero al no tener completada la diligencia por la falta de aprobación del Concejo, continuaban registrados.

Fuentes de la Comuna explicaron que mucha gente detectó la irregularidad al concurrir al municipio al solicitar un permiso de obra y encontrar, consecuentemente, la traba en esa solicitud.

Por esto, desde la secretaría de Gestión Pública se detectaron en un principio 31 casos de particulares cuyos edificios se encontraban con el trámite incompleto, sin figurar en el catálogo pero sin poder disponer a pleno para las operaciones inmobiliarias de sus propiedades, y la semana pasada se envió el compendio al Concejo Deliberante para su conclusión.

PEDIDO DE INVESTIGACION

A su ingreso, los expedientes fueron girados a la comisión de Planeamiento, en la que concejales del oficialismo y la oposición hicieron un análisis detallado de los casos presentados y concluyeron en elaborar un despacho para solicitar al Departamento Ejecutivo que, en un trabajo conjunto, elabore un veredicto caso por caso, frente al número de irregularidades detectadas en ese sentido.

Es que, según explicaron desde la comisión de Planeamiento que preside Gabriel Bruera, “se hallaron muchos más que 31 expedientes en esta situación y como ocurrió en la gestión anterior a la del intendente Pablo Bruera no se conocen los motivos del presunto error administrativo”.